Abrir un restaurante puede resultar agobiante, pues en el camino seguramente te encontrarás con algunas dificultades y dudas. No obstante, la decisión de iniciar tu propio negocio es una gran oportunidad para generar ingresos y convertirte en un exitoso emprendedor.

Existe una serie de aspectos que hay que tomar en cuenta para que todo salga de acuerdo con el plan, y por supuesto hay otros que debes de evitar para no tener consecuencias negativas. Te los mencionamos a continuación:

Pensar que por ser propietario no debes trabajar Tómate muy en serio tu papel de propietario y lo que esto significa, es decir, estar en el restaurante la mayor parte del tiempo, sobre todo al principio de la apertura. No se trata de estar 24/7, lo importante es que estés el tiempo necesario para supervisar, guiar a tu equipo, negociar con proveedores y planificar estrategias de ventas.

Plan de negocios claro Infórmate adecuadamente de qué es lo que necesitas para la apertura de un restaurante para de esta manera, crear un plan de negocios y evitar muchas sorpresas que no sabías como el trámite de permisos, normas sanitarias y leyes fiscales.

No tener un concepto Debes aterrizar con claridad cuál es el tipo de comida que quieres vender para poder organizar el menú y la decoración del lugar. A los comensales les gusta llegar a los restaurantes y tener claro la experiencia culinaria que van a tener en ese lugar. Sin concepto, los comensales se confunden además de que esta situación no da una buena impresión, así que será más complicado que lo recuerden por los motivos correctos.

Elige al personal adecuado Se considera que contratar amigos y familiares es una buena opción porque son personas que conoces y podría existir cierta confianza pero no siempre es así.Al contratarlos, la relación cambia y si existe algún tipo de complicación se puede llegar a tomar de manera personal. Es vital contratar un equipo de personas capacitadas para cada puesto y decididas a sentir este proyecto como suyo. Está elección requiere de tiempo ya que puede ser que no encuentres al personal ideal a la primera, pero no desistas.